``` `
Ser mujer, ser judía y tener un hijo en 1966 son los tres “pecados” que cometió Lubov Lvovna Perelmán, prometedora licenciada rusa en Matemáticas. Tres “pecados” que le impidieron desarrollar su tesis doctoral en la Universidad de Leningrado, hoy San Petersburgo, bajo la dirección del matemático Garal’d Isidorovich Natanson. Ella tuvo que elegir entre ser doctora en Matemáticas o ser madre; eligió lo segundo y acabó de profesora de matemáticas en una escuela.