"Mi liberación es una gran victoria también para los mexicanos... Mi caso no es único", declaró la francesa Florence Cassez al llegar el jueves a París, donde fue recibida por representantes del gobierno y por numerosos allegados y periodistas en el desenlace de una larga batalla judicial y diplomática. Cassez, de 38 años, pasó siete años detenida en México, y fue liberada el miércoles por decisión de la Corte Suprema de ese país, que dejó sin efecto una sentencia a 60 años de cárcel por secuestros, aseguró AFP. La Corte estimó que el arresto de Cassez estuvo rodeado de irregularidades que comprometían los argumentos de la acusación, aunque no se pronunció sobre su inocencia, que la francesa reivindica con vehemencia.