Jorge Octavio Ávila Martínez, estudiante de gastronomía utilizaba su tiempo libre para vender alimentos afuera de diferentes preparatorias y Cologios de Ciencias y Humanidades (CCH), pero los muffins de chocolate, el mole, las enchiladas y los hot cakes contenían un ingrediente especial: marihuana. Se desconoce si alguien dio el pitazo o si el éxito de los alimentos fue sospechoso, pero el joven que llevaba dos meses con el negocio fue detenido, en la puerta de la preparatoria José Vasconcelos, por elementos de la Unidad de Seguridad Escolar de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal. “¡Llévelos llévelos, pastelitos felices de a 20 pesitos. Para los nervios del examen, para volar en clases y pasarla chido, llévelos llévelos!”, gritaba Ávila Martínez a sus clientes, quienes le sugirieron agregara marihuana a los productos.