``` `
scena número uno. De improviso, avanzada la tarde, a una alta ejecutiva le surge una importante cena de trabajo. Tiene que dar una buena impresión a primera vista, así que corre a su tienda de ropa favorita. Se prueba un vestido. Le queda perfecto, se lo deja puesto. Error. No solo se lleva al restaurante el último modelo de su marca favorita, sino, tal vez, un futuro problema cutáneo. Escena número dos. Un niño de 12 años se resiste a ir de compras, a pesar del gran poder de decisión con el que cuenta, pero al final termina convencido. Y encantado, porque ha encontrado una camiseta increíble. Le gusta tanto que sale de la tienda con ella puesta. Otro error. En su cabeza puede que reciba visitas indeseadas. Avaladas por la ciencia, existen tres razones fundamentales (dermatológicas e higiénicas) para seguir este consejo: lave su ropa al menos una vez antes de estrenarla. Aquí están:
...
Cerrajeros Barcelona