8
Hemos sabido de leyendas que terminan un partido con el hombro dislocado. También hemos visto a futbolistas que se aferran a cumplir los 90 minutos a pesar de estar descalabrados o con una ceja abierta. Pero de eso a terminar todo un juego con el trasero lleno de sangre no todos los días. Pues Leonardo Ponzio, volante de River Plate, lo hizo en el duelo donde el Millo ganó 2-1 a Boca Unidos este fin de semana.